La ira en Grecia por la mala seguridad ferroviaria creció este jueves cuando el número de muertos por uno de los peores accidentes de trenes del país en los últimos años llegó a 57.
Manifestantes salieron a las calles después de la colisión frontal entre un tren de pasajeros que transportaba más de 350 personas y un tren de carga este martes por la noche en Tempi, cerca de la ciudad de Larissa.
Manifestantes se enfrentaron con la policía en Atenas, la capital, mientras el ministro de transporte del país renunció a raíz de la tragedia y un sindicato de trabajadores ferroviarios se declaró en huelga, acusando al gobierno de “falta de respeto” en el sector.
Otras 48 personas permanecen en el hospital como resultado del accidente, que dejó vagones volcados y escombros quemados a su paso. Seis de los heridos que están siendo atendidos se encuentran en estado crítico debido a heridas en la cabeza y quemaduras graves, informó este jueves la emisora pública ERT.
Después de que un gerente de la estación de tren en Larissa fuera arrestado en relación con la colisión, las autoridades griegas también publicaron este jueves impactantes grabaciones de audio que muestran a uno de los conductores del tren recibiendo instrucciones para ignorar una luz roja.
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